VALENCIA, 3 FEB. (AVAN).- El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha alentado a las personas consagradas a afirmar con la vida y la palabra, sin rodeos, el amor de Dios a todos y a cada uno.
Durante la misa que presidió ayer tarde con motivo de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, en la que participaron representantes de los institutos de vida consagrada y sociedades de vida apostólica de la archidiócesis, el Cardenal añadió que vuestra vida consagrada es una de las señales más elocuentes de la presencia y soberanía de Dios en este mundo y de la libertad de sus hijos.
De igual modo, subrayó en su homilía, en la misa que tuvo lugar en la parroquia de Nuestra Señora del Carmen de Valencia, que nuestra sociedad, y en especial los niños y los jóvenes, tienen necesidad de ver personas consagradas que dan testimonio de Dios mismo ante un mundo que lo niega u olvida,
Nuestro mundo, tan cerrado sobre si mismo a Dios necesita, más que nunca, de ese testimonio porque sin el podrían cerrarse todos los resquicios por el que la luz entra en nuestro mundo, añadió.
Asimismo, continuó afirmando que este testimonio tan necesario, urgente y apremiante en diferentes ámbitos de la vida, lo es, de manera singular y concreta, en el ámbito de la caridad, de la evangelización y de la educación en la que Jesucristo es su centro, el verdadero camino, toda la verdad y la vida.
Según el Cardenal una de las formas de la caridad, muy relevante en estos días, la dedicación a la educación cristiana de los niños y de los jóvenes. A nuestro mundo le vendría muy bien, necesita una juventud más esperanzada y confiada, destacó.
Igualmente, al término de la eucaristía, concelebrada por los obispos auxiliares de Valencia, monseñores Esteban Escudero y Javier Salinas, y en la que también se conmemoró el 70 aniversario de la constitución Provida Mater para la institución de los Institutos Seculares, el Cardenal anunció la creación de un Consejo Diocesano de Vida Consagrada.
La misa comenzó con la bendición de las candelas encendidas y la procesión de entrada al templo, donde, tuvo lugar la eucaristía y la renovación de compromisos por los consagrados y consagradas.
En la jornada de ayer todos los consagrados renovaron sus compromisos religiosos y apostólicos en el transcurso de las misas que se celebraron en conventos, monasterios y comunidades religiosas.
En la actualidad, la archidiócesis de Valencia cuenta con más de 4.600 consagrados, entre ellos cerca de 700 religiosos y más de 3.900 religiosas, además de miembros de institutos seculares y de sociedades de vida apostólica.
La Jornada Mundial de la Vida Consagrada fue promovida por el papa Juan Pablo II en 1997 y ha tenido como lema este año Testigos de la esperanza y la alegría. (AVAN)
(Fotografías: V. Gutiérrez)
Fuente original: http://www.archivalencia.org/contenido.php?a=6&pad=6&modulo=37&id=14986&pagina=1