Se concluyó el Sínodo de la Familia y el Papa lo hizo recordando a los obispos y a los asistentes sus obligaciones como pastores que escuchan a Jesús.
Y es que, la misa celebrada este domingo sirvió al máximo representante de la iglesia para cerrar el Sínodo más transparente de los 27 celebrados.
De hecho, el Santo padre recordó que los sucesores de los Apóstoles no deben estar obsesionados por sus horarios ni su calendario de actividades sino por las personas.
“Los discípulos de Jesús están llamados a poner al hombre en contacto con la Misericordia compasiva que salva», es decir, con Dios, que es misericordia”, dijo el Papa Francisco.
Tras tres semanas de debates, se da por concluido un Sinodo que ha llevado a 270 padres sinodales, 24 expertos, 51 observadores y 14 delegados fraternos a participar en una asamblea para tratar temas de actualidad en la iglesia como el de los divorciados y su condición.
De hecho, entre los asistentes a este Sínodo cabe recordar que se encontraba 18 matrimonios y 13 mujeres a título individual entre las que se encontraban como teólogas o expertas en bioética, pastoral familiar.