El Papa Francisco quiso acordarse de la difícil situación que vive un país como Ucrania y pidió recoger fondos el próximo 24 de abril en las parroquias de Europa para destinarlos a sus gentes.
Y es que, tras la misa del Santo Padre dedicada a la Misericordia, el argentino recordó el país europeo que ha vivido en los últimos meses conflictos armados con Rusia y con sus gentes entre separatistas e integristas.
Por ello, el Papa Francisco no dudó en reconocer que se acuerda de “quienes se encuentran en estas tierras golpeadas por la hostilidad, que ya ha causado varios miles de muertos, y a quienes, más de un millón, se han visto obligados a abandonarlas ante la grave situación».
No obstante, la mención del Papa fue la excusa perfecta para pedir una “generosa donación” de los fieles católicos que pueda servir para, tal y como dijo, “aliviar los sufrimientos materiales que exprese mi cercanía y solidaridad y la de toda la Iglesia con Ucrania».
Cabe recordar que según la información que maneja el Vaticano, unas «800.000 personas se encuentran desplazadas» en territorios bajo control del Gobierno ucraniano, así como 2.700.000 personas en zonas bajo control de los separatistas prorrusos en el este del país.
De hecho, según informaron desde la radio oficial del Vaticano, “uno de cada cuatro niños ucranianos es un desplazado”.