VALENCIA, 22 ABR. (AVAN-AUDIO).- La Catedral de Valencia ha retirado los andamios instalados en la calle Barchilla durante las obras de ampliación del nuevo museo, una actuación que comenzó hace 17 meses y que permite ver, por primera vez, la fachada completa de la Capilla del Santo Cáliz, que ha sido restaurada, a través de una lámina de cristal.
Las obras de restauración y ampliación del museo son impulsadas por el Cabildo Catedralicio y dirigidas por Salvador Vila Ferrer, arquitecto conservador de la Catedral, y se encuentran en su fase final, en el inicio de la colocación de las obras de arte, los rótulos y señalizaciones, según ha indicado hoy a la agencia AVAN Jaime Sancho, Canónigo Conservador del Patrimonio Artístico de la Catedral.
La retirada de andamios permite ver, en la calle Barchilla, la antigua fachada del museo, del siglo XX pero que mantiene los sillares a la vista en las esquinas y los enrejados del siglo XV, que han sido restauradas, y en la que se ha sustituido, además, la cornisa superior, que era de una imitación de tejado, por una de piedra, ha añadido.
Además, ahora también se puede ver desde la calle Barchilla, y desde el interior del propio museo, la fachada de la capilla del Santo Cáliz, del siglo XIV, separada del museo por una lámina de cristal, según Sancho.
Esta fachada ha sido igualmente restaurada dejando las huellas del muro calcinado por el incendio en 1936 y de los tejados de dos edificios que existieron, que son la Librería de los Borja, del siglo XV, y el llamado ´traste de los canónigos`, del XIX, destruido en la Guerra Civil.
El nuevo museo catedralicio triplicará su espacio
Asimismo, el nuevo museo, que abrirá sus puertas antes de verano, ha triplicado su espacio expositivo, que ha aumentado de una a tres plantas, con la incorporación de una sala superior y otra inferior, lo que permitirá, igualmente, exponer al público 300 piezas, tanto las que estaban en el anterior museo como obras hasta ahora almacenadas, y que hemos restaurado en los últimos años, porque, además, no hemos retirado nada de la Catedral para exponerlo en el museo, ha subrayado.
La ampliación ha sido posible gracias a la incorporación de la planta superior, en la que se ha recuperado el espacio que ocupaba la librería construida entre 1438 y 1442, conocida también como Biblioteca de los Borja o Llibreria Nova, incluyendo la columna helicoidal central, muy interesante porque es anterior a las de la Lonja, y las ventanas, así como de la planta inferior, en el subsuelo.
De esta forma, se han realizado excavaciones a lo largo del museo y, aunque no hemos encontrado restos de la antigua mezquita, que seguramente estaba más al norte, sí han aparecido los distintos estratos de los cementerios que rodeaban la Seo y restos como sillares de edificaciones romanas y muro tapial de la época árabe.
Por todo ello, el nuevo museo, cuya última reforma se llevó a cabo en los años sesenta del siglo pasado, tiene un interés en sí mismo como edificio histórico y también por todo el patrimonio que se va a exponer, y la entrada estará integrada en la visita a la Catedral, ha comentado Sancho.
(Fotografías: En la fotografía superior se puede observar el cristal que separa la fachada del museo, a la derecha, del muro de la Capilla del Santo Cáliz, a la izquierda. Firma: V. Gutiérrez)
Fuente original: http://www.archivalencia.org/contenido.php?a=6&pad=6&modulo=37&id=13637&pagina=1