Hasta 270 padres sinodales se darán cita durante las próximas semanas en el encuentro que el Papa tendrá con obispos, cardenales, teólogos y familias para abordar uno de los temas que más preocupan en la actualidad, “ofrecer respuestas ante los desafíos de la familia hoy”.
Y es que, muchas son las preguntas que se están formando en los últimos años sobre la posición de la Iglesia ante temas como los matrimonios gay, la comunión de los divorciados o la legalización de la parejas de hecho.
De hecho, estos temas están trayendo consigo muchas controversias dentro de la propia Iglesia ya que, la postura del Papa, mucho más aperturista que la de otros, está haciendo que algunos religiosos se muestren en contra de las acciones que pretende el máximo responsable de la Iglesia.
Entre los más críticos a la postura aperturista del argentino encontramos al exarzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, quien no ha dudado en manifestar su rechazo a que los divorciados que se hayan vuelto a casar puedan comulgar o a las parejas homosexuales.
No obstante, la del Rouco no es la única voz crítica ya que existen otras como la del cardenal de Bolonia, Carlo Caffarra, quien ha afirmado recientemente que “admitir legítimamente a los divorciados que se han vuelto a casar en la Eucaristía niega la ontología sacramental del matrimonio y reduce la indisolubilidad a una ley moral».
“Tal admisión querría decir cambiar la doctrina del matrimonio, de la eucaristía, de la confesión, de la Iglesia sobre la sexualidad y tendría una relevancia pedagógica destructiva porque ante esta decisión”, ha manifestado recientemente.
Otro de los críticos a la posición aperturista del Papa es el cardenal Leo Burke, quien no ha tenido inconveniente alguno en erigirse como una de las cabezas visibles de la oposición al argentino.
«Es impensable que la Iglesia haga hipótesis de una equivalencia de hecho, no sólo en el ámbito legal, entre una relación y una pareja heterosexual y una relación de carácter homosexual, porque esto sería la subversión de la ley natural y del designio de amor de Dios creador», ha manifestado a través de un documento que expresa la postura de otros sacerdotes.