VALENCIA, 18 ABR. (AVAN) .- Los resultados de la investigación que María Luisa Alcalá, vicedecana de Enfermería de la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir (UCV), ha realizado para su tesis doctoral muestran, entre otras conclusiones, que en los últimos años los amigos han sustituido a los hermanos en la escala de influencia sobre los adolescentes valencianos a la hora de ponerse a dieta.
Así, en la realización de una dieta restrictiva, que es el término médico, el orden de los agentes ha variado en la parte intermedia de la escala -segunda y tercera posición-, donde la influencia de los amigos ha sobrepasado a la de los hermanos.
Se mantienen, sin embargo, la influencia de la madre en primer lugar y el padre continúa en la última, según ha indicado María Luisa Alcalá. «En la Comunitat Valenciana, la madre sigue siendo el motor de los hábitos alimentarios familiares. Es ella la que decide qué se come en casa», ha añadido.
La experta de la UCV ha llegado a estas conclusiones tras comparar los datos correspondientes a los estudiantes de segundo, tercero y cuarto curso de E.S.O (13-16 años) en los cursos 2006-2007 y 2012-2013 que contiene el Programa de Promoción de la Salud y Prevención de Trastornos de la Conducta Alimentaria de la Generalitat Valenciana. El total, suma unos 25.000 alumnos entre ambas promociones, ha indicado.
De igual modo, Alcalá relata en su tesis que ha disminuido el número de adolescentes valencianos que realiza ejercicio físico y, a su vez, han aumentado los casos de obesidad y el número de púberes que se somete a dietas restrictivas.
La experta de la UCV subraya, además, que existe un porcentaje «aún pequeño» que no hace nada de ejercicio fuera de las clases de Educación Física. «Los niños valencianos están apuntados a muchas extraescolares pero eso cambia cuando llegan a la adolescencia, salvo los que compiten en algún deporte, el resto no tiene tendencia a realizar ejercicio físico».
Para Alcalá la situación es «muy mala» de cara al futuro. La falta de actividades deportivas hace que estos adolescentes «se conviertan en adultos con enfermedades cardiovasculares y crónico degenerativas a edades mucho más tempranas».
Malos hábitos alimenticios
El problema no sólo se encuentra en los bajos niveles de actividad física. Así, la adquisición de hábitos alimenticios erróneos entre los púberes valencianos ha conllevado que el número de adolescentes con obesidad sea mayor.
La experta de la UCV ha corroborado en su estudio que en el periodo de años analizado ha aumentado la cifra de los estudiantes que se someten a dietas restrictivas. Se trata de una subida «poco significativa», pero la vicedecana de Enfermería cree que el porcentaje de adolescentes obesos seguirá aumentando. En ese sentido, lamenta la invasión de la cultura alimenticia anglosajona, que ha dejado a un lado la dieta mediterránea, «la más sana y equilibrada del mundo, probablemente».
La tesis de Alcalá, dirigida por Luis Rojo, catedrático de Psiquiatría de la Universitat de València (UV), y Elías Ruiz, profesor de la UCV, ha contado en la defensa de la misma con un tribunal compuesto por María Luisa García Merita, de la UV, que ha actuado como presidenta; María Benlloch, de la UCV, que ha detentado el cargo de secretaria del tribunal; y Luis Beato, del Hospital General Universitario de Ciudad Real.
Fuente original: http://www.archivalencia.org/contenido.php?a=6&pad=6&modulo=37&id=13604&pagina=1